Friday, March 30, 2007
71 - No podréis quitarme el miedo que tengo
Juan Ignacio Luca de Tena narra una anécdota en su libro "Mis amigos muertos", pp. 150-1 sobre Pedro Muñoz Seca, que fue asesinado el 28 de noviembre de 1936, en Paracuellos:
En todo tiempo y con distintos regímenes es costumbre despojar a los presos, cuando ingresan en las cárceles, de cuanto llevan encima, que después les devuelven al ser puestos en libertad. Pero excusado es imaginar los malos modos y la grosería con que cumplieron con este rito los encargados de la Modelo de Madrid, cuando ingresó en ella Pedro Muñoz Seca. Conocidos de muchos son las palabras que entonces pronunció, porque le brotaba la gracia hasta en los momentos más dramáticos:
-Podréis quitarme la cartera, podréis quitarme las monedas que llevo encima, podréis quitarme el reloj de mi muñeca y las llaves que llevo en el bolsillo, podréis quitarme hasta la vida; sólo hay una cosa que no podréis quitarme, por mucho empeño que pongáis: el miedo que tengo.
En todo tiempo y con distintos regímenes es costumbre despojar a los presos, cuando ingresan en las cárceles, de cuanto llevan encima, que después les devuelven al ser puestos en libertad. Pero excusado es imaginar los malos modos y la grosería con que cumplieron con este rito los encargados de la Modelo de Madrid, cuando ingresó en ella Pedro Muñoz Seca. Conocidos de muchos son las palabras que entonces pronunció, porque le brotaba la gracia hasta en los momentos más dramáticos:
-Podréis quitarme la cartera, podréis quitarme las monedas que llevo encima, podréis quitarme el reloj de mi muñeca y las llaves que llevo en el bolsillo, podréis quitarme hasta la vida; sólo hay una cosa que no podréis quitarme, por mucho empeño que pongáis: el miedo que tengo.