Wednesday, May 16, 2007
116 - ¡Yo no me canso nunca!
De un suceso real:
En el puente Flaminio, en Roma, que es una construcción muy monumental, mandada construir por Mussolini, había alguien que se dedicaba a hacer pintadas cada día. La piedra de travertino blanco aparecía muy sucia.
El alcalde ordenó en un momento dado que se limpiara la piedra del puente, pues estaba hecho un asco.
La mañana siguiente a la que terminaron los trabajos, y sobre la piedra blanca que relucía como nueva, apareció una nueva pintada en la que se leía:
-IO NON MI STANCO MAI (¡yo no me canso nunca!).